Según la teoría funcionalista, la prostitución existe porque cumple múltiples funciones sociales. Estas funciones incluyen proporcionar a las prostitutas una fuente de ingresos y ofrecer opciones sexuales a hombres con motivaciones específicas.
La prostitución suele tener su origen en la pobreza de las mujeres y en la imagen que la cultura tiene de ellas como objetos sexuales para el placer masculino. En las sociedades patriarcales, la prostitución también puede reflejar cómo las mujeres son vistas como objetos para satisfacer las necesidades masculinas de placer sexual.
Los clientes suelen buscar interacciones sexuales breves y remuneradas
Esto puede incluir sexo pene-vagina, sexo oral sin preservativo o besos profundos. A veces, los clientes también desean una experiencia sexual emocionalmente satisfactoria que no pueden encontrar en otras formas de actividad. Los profesionales de la prostitución tienden a creer que sus clientes las encuentran atractivos por ser sexualmente activas, poseer atributos físicos vitales y tener una amplia experiencia y conocimientos en materia sexual.
Los profesionales de la prostitución suelen considerar atractivos a sus clientes porque están dispuestos a pagar en efectivo los servicios de escorts santiago. Esto puede deberse a varios factores, como ganar una suma importante o simplemente tener una excelente reputación que haga creer a los clientes que pueden confiar en ellas.
La percepción que el cliente tiene de sí mismo también puede verse afectada por sus valores y creencias sobre cómo tratar a los demás, como el deseo de independencia, el miedo a ser descubierto o la creencia de que la prostitución es inmoral.
Un estudio estadounidense reciente investigó cómo se ven a sí mismos los clientes de la prostitución
Desafortunadamente, esta investigación utilizó varias metodologías de investigación, lo que revela advertencias críticas a la hora de leer sus resultados. Como ya se ha mencionado, el estudio se basó en gran medida en las respuestas de las propias trabajadoras del sexo. Por desgracia, esta pequeña muestra es una representación imperfecta de un grupo mucho más amplio.
Además, este estudio no incluyó un grupo de control que nunca hubiera experimentado la prostitución; esto aumentó las posibilidades de que las personas sesgaran sus respuestas a la encuesta.
Una investigación más profunda reveló que este estudio necesitaba más significación estadística, lo que significa que tenía que haber una forma de verificar si sus resultados eran válidos.
El estudio es provocativo, pero también tiene varios inconvenientes importantes. Se basó en una pequeña muestra de encuestados residentes en Estados Unidos. No incorporó un grupo de control formado por quienes nunca han ejercido la prostitución, problemas todos ellos que hacen que esta investigación sea defectuosa e inadecuada para su propósito.
Los malentendidos con respecto a las trabajadoras del sexo suelen deberse a que no se entiende cómo funciona la industria
Por ejemplo, algunas mujeres eligen el trabajo sexual para liberarse del matrimonio y las responsabilidades familiares; otras lo hacen por dinero o para escapar de una relación abusiva.
Otro tipo de trabajadora sexual se ve a sí misma como la proverbial «manitas». El hecho de desempeñar múltiples funciones pero carecer de acceso a los recursos disponibles en otras partes de su fuerza de trabajo puede crear tensiones o desconfianza entre los miembros de este nivel concreto de trabajadores y otros dentro de su grupo de empleo.
Algunos profesionales del sexo se consideran héroes en la lucha contra la violencia sexual. Por ejemplo, un grupo de la India conocido como «luchadores del sexo» utiliza su experiencia para educar a las víctimas sobre la violencia sexual y ayudarlas a recuperarse. Además, estas trabajadoras enseñan a sus clientes a controlar sus vidas negándose a participar en prácticas sexuales nocivas o en la explotación.
Un tercio de las trabajadoras del sexo se ven a sí mismas como heroínas en la batalla contra la pobreza, el hambre y la falta de oportunidades. Estas mujeres suelen actuar como agentes del cambio y se esfuerzan por dejar una huella impresionante en el mundo.
En el negocio del sexo, prosperar consiste en ofrecer un servicio de calidad a los clientes respetando todas las leyes y reglamentos
Las trabajadoras del sexo deben aprender a utilizar eficazmente los encantos femeninos para atraer a los clientes, una tarea intrincada que requiere una formación y una devoción considerables por parte de todos los implicados. Por ello, los trabajadores de esta industria deben utilizar todos los recursos disponibles en su región. La prostitución puede ser vista como una vía para ganar dinero y una vía de escape de sus vidas actuales; algunos individuos ven la prostitución como ambas cosas.
El deseo de una persona de enriquecerse con el juego indica hasta qué punto prioriza el dinero y el poder. Dan mucha importancia a las recompensas a corto plazo, mientras que son incapaces de centrarse en objetivos a largo plazo, lo que les hace sentirse impotentes ante sus elecciones de estilo de vida y desesperanzados como salida.
Las recesiones económicas suelen crear la percepción de que la prostitución es una forma fácil de ganar dinero, lo que atrae a clientes que buscan soluciones rápidas. Esto puede motivar especialmente a las trabajadoras del sexo de alto nivel, cuyos clientes les pagan miles de euros al mes por servicios sexuales y apoyo emocional.
Muchos de estos clientes son gerentes de servicios de acompañantes y propietarios de clubes de striptease que quieren asumir los riesgos de la prostitución Se acercan a las prostitutas ofreciéndoles pequeñas primas como plan de seguro para cubrir pérdidas.
Otros clientes pueden sentirse atraídos por este estilo de vida porque se identifican con las mujeres
Esto es especialmente relevante entre adolescentes y adultos jóvenes que han sufrido abusos o abandono, y que a menudo aterrizan en el sistema de justicia penal.
La prostitución puede atraerlos porque no pueden encontrar o mantener una relación sexual adecuada y convencional, posiblemente porque han tenido experiencias de violencia o abuso de drogas en el pasado sin una brújula moral establecida.
Más allá de sus consideraciones económicas, estos clientes valoran el establecimiento de relaciones significativas con los profesionales del sexo. Como resultado, estos clientes pueden pagar más por el confort y la afirmación de las prostitutas, a menudo llegando a ser muy dedicados.
Estos clientes poseen una perspectiva profundamente compleja de la prostitución que podría explorarse mediante diseños de investigación longitudinal. Además, se podrían explorar potencialmente dinámicas psicológicas dentro de esta perspectiva a lo largo del tiempo.
Cuando alguien no siente que tiene suficiente conexión física con su pareja, puede sentirse obligado a buscar la prostitución como fuente de consuelo temporal
Esto puede indicar problemas en su relación, como una comunicación o comprensión ineficaz de cómo funciona el deseo o un simple derecho sin darse cuenta del daño que esto puede causarle.
La depresión también puede ser un signo revelador de que la persona carece de suficiente autoestima para hacer frente a su situación, como haber sufrido recientemente una ruptura o haber sufrido abusos, y busca recuperar el control.
Muchas trabajadoras del sexo pueden mantener su sentido de la identidad sin dejar de ser profesionales aislando ciertas sensaciones en su entorno laboral y otras en su vida personal. Esto puede implicar la creación de un personaje artificial o alter ego con comportamientos específicos. Incluso pueden referirse a sí mismas en tercera persona cuando hablan de sus personajes laborales.
Las trabajadoras del sexo que ejercen en lugares cerrados tienden a percibir su función como un servicio inestimable para los clientes a los que atienden, principalmente ancianos; las trabajadoras del sexo que ejercen al aire libre tienden a percibirla como una explotación sexual; esto puede estar relacionado con diferentes entornos de trabajo o actitudes sobre cómo interactúan los clientes y ellas mismas.
Algunos profesionales del sexo consideran que su profesión es más gratificante que otros trabajos
Estas profesionales sexuales piensan esto porque pueden controlar cómo interactúan con los clientes y seleccionar en qué actividades sexuales participar con ellos. También pueden sentir que sacan el máximo partido a su dinero y que se mantienen económicamente al dedicarse a esta actividad.
Sin embargo, este estudio también destaca la dificultad de las mujeres para separar el trabajo de la vida personal. Esto puede deberse a que las emociones del trabajo a menudo repercuten negativamente en la vida doméstica o en las relaciones, a los síntomas de depresión o ansiedad y a la dificultad para establecer límites adecuados entre el trabajo sexual y su vida personal.
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